Hoy pasaremos del departamento del Lot al del Dordogne. Hasta ahora me guiaba con un mapa de esos que te dan en las oficinas de turismo. Y concretamente del departamento del Lot. Cuando pasemos a la Dordogne apenas tendremos referencias. Esto, tal vez sea un poco imprudente, pero me gusta ir descubriendo las cosas sin esperarlas. A cada vuelta del río nos encontramos con algo totalmente inesperado y por ello mucho más sorprendente y mágico. Lo negativo es que te pueden pasar cosas como las de la segunda etapa, pero la aventura es la aventura y vivirla aunque sea forzadamente siempre es bonito.
Remando en las zonas más abiertas del río
Nuestro plan era hacer dos etapas desde Souillac a Beynac, pero los dos días de retraso después del naufragio nos han dejado la llegada a Beynac en sábado si lo hacemos en dos jornadas. El domingo sería el día de regreso a buscar el coche al punto de partida, y la logística que tenemos plateada no es posible ese día (ver datos prácticos al final de este relato). Por tanto decidimos apurar lo que queda de la ruta en una sola etapa mucho más larga que las anteriores. Aún así, el cuerpo se va haciendo al remo y no nos cuesta mucho mantener un buen ritmo de paleo durante más tiempo y, sin dejar de disfrutar de todo lo que va pasando ante nuestros ojos, avanzamos rápidamente camino de nuestra meta final.
De vez en cuando un rápido proporciona algo de emoción a la marcha. En las paredes laterales del cañón las rocas de caprichosas formas se mantienen en un milagroso equilibrio, puentes de roca a través de los cuales se ve el cielo, túneles que invitan a la exploración. Cada vez es más frecuente ver asomar un palacio o un castillo entre la densa arboleda que cubre las laderas. El circulo de Montfort, así conocido porque el castillo que le da nombre se eleva en el mismo borde del acantilado en el centro de un cerrado meandro, es un auténtico regalo para la vista. Todo en esta sección del río es un espectáculo.
Pasando bajo palacios y castillos. En el centro, el de Castelnaud y abajo el de Montfort
Después de un ancho y largo recodo aparece frente a nosotros, como por arte de magia, una gran muralla rocosa en la que totalmente integrado se encuentra un pueblo increible. Es La Roque Gageac, uno de los pueblos más pintorescos de Francia. Para nosotros la sorpresa es inmensa porque nunca habíamos oído hablar de este fantástico sitio. No podemos evitar desembarcar en él aunque ello nos retrase un tiempo en nuestra llegada a Beynac, la cual ya intuíamos tardía (no está permitida la navegación en el río después de la seis de la tarde).
Llegando a La Roque Gageac
Aun siendo la etapa más larga de todo nuestro periplo, el tiempo se nos pasa sin darnos cuenta. Entre La Roque y Beynac encontramos hasta cuatro castillos más jalonando la ruta. Cada uno con una arquitectura diferente y la llegada a Beynac, otro gran espectáculo. Ahora entiendo porque aunque el Dordogne sigue todavía aguas abajo, recomiendan acabar en este pueblo. No se puede uno imaginar un final más hermoso para esta magnifica ruta.
Llegando a Beynac
Beynac es una antigua ciudad colgada en un alto risco coronado por otro castillo, bajo la cual corre le Dordogne. A la orilla del río, justo debajo del castillo encontramos un embarcadero junto a un buen camping, el mejor de los que hemos utilizado en toda la ruta. Piscina y otros servicios nos proporcionan un final de ruta digno de reyes. El tiempo sigue inmejorable.
Camping Lapeirou, en Beynac
El Dordogne desde el castillo de Beynac. a la izquierda se puede ver el camping
El día siguiente lo empleamos en volver a buscar la furgoneta a Beaulieu, pero nos quedamos un día más en Beynac para dedicarlo a visitar éste y otros pueblos y castillos de la zona. Vamos, como cualquier otro turista. Hemos quedado embriagados de estos paisajes. Si el destino lo permite, volveremos con los kayaks para recorrer otro tramo del Dordogne o cualquier otro de los ríos que discurren por esta bellísima región del país vecino.
LOGISTICA DE LA RUTA
Como ya comenté al principio del primer artículo, el tramo del Dordogne que más se hace es este que nosotros hemos hecho en cuatro días, saliendo de Argentat y con final en Beynac. En él se concentran la mayor parte de los atractivos de este singular río, sin duda el más popular de Francia. El precio que hay que pagar por ello es la sobre frecuentación de canoistas en ciertas épocas y en ciertos tramos.
Si se quiere estar solo en el Dordogne hay que ir fuera de la temporada de vacaciones. Nosotros, al final de agosto y tras unos días de mal tiempo, pudimos disfrutar de una cierta soledad, pero para asegurarla habría que plantearse ir a finales de septiembre o en octubre. Puede que también sea buena fecha la primavera, pero habrá que contar con un caudal mayor y por consiguiente rápidos más difíciles en la primera etapa. No hace falta ningún permiso especial para remar en el Dordogne y casi en ningún río francés. Sólo un seguro que cubra la responsabilidad civil.
EMBARCACION
El Dordogne se puede considerar un río fácil. Predominan las aguas tranquilas, aunque siempre lleva corriente. Los rápidos son amplios y fáciles, si uno va por el buen camino, Mucha gente lo hace con canoas canadienses (son las que emplean las empresas de alquiler). Nosotros fuimos con kayaks de mar cortos (3,90) y fueron ideales. Suficientemente rápidos en las aguas tranquilas y bastante ágiles en los rápidos. Admiten una buena carga para llevar todo lo necesario y se transportan bien. Creo que puede ser la embarcación ideal para ríos como este.
DORMIR Y COMER
Toda la ruta está jalonada de campings de la más variada categoría por lo que no es problema encontrar donde dormir planteándose cualquier número de etapas. En cuanto a la comida, conviene llevar consigo lo suficiente para cubrir cualquier eventualidad. En los campings sólo vamos a encontrar galletas, alguna conserva y poco más y el pan hay que encargarlo a la llegada para tenerlo al día siguiente. En los pueblos más pequeños no hay tiendas y en los grandes hay que tener en cuenta el horario de cierre. El precio de los campings oscila entre los 10 y los 12 euros para dos personas, tienda y kayak. En todos ellos hay una zona cubierta para uso de los campistas en caso de mal tiempo.
TRANSPORTE AL COMIENZO DE LA RUTA
Este es el punto más problemático. Si vais en pandilla con otros amigos, no hay problema, porque dejareis uno de los coches al final de la ruta para ir con él a recoger el que quedó en al punto de partida. Nosotros fuimos solos y dimos muchas vueltas hasta dar con la solución.
En la primera etapa, una de las empresas que hacen la ruta con sus clientes se prestó a llevarme con ellos hasta Argentat por el módico precio de cinco euros. Mientras, Pilar quedaba en el camping de Beaulieu esperando con los Kayaks. Pero esto es muy difícil, ya que no quieren facilitar las cosas a los que van de por libre. Así pues, partíamos de Beaulieu como un principio de ruta nuevamente. La solución fue la que facilito a continuación:
Beynac-Sarlat. 14 Km. en autostop (la mitad lo hicimos a pie)(sino taxi).
Sarlat-Souillac. En autobús. Salida de la estación de tren a las 12:12 h. de Sarlat y llegada a las 12:53 h. a Souillac.
Souillac-Saint Denis Pres Martel. En autobús. Salida de la estación de tren a las 13:25 h. de Souillac y llegada a S. Denis a las 13:55 h.
Saint Denis-Bretenoux Biars. En tren. Salida de S. Denis a las 14:56 h. y llegada a Bretenoux a las 15:13 h.
Bretenoux-Beaulieu. 7 Km. en autostop o taxi (nosotros lo hicimos también parte a pie y parte a dedo). Los horarios son sólo validos para días laborales incluidos sábados y los billetes se pueden comprar para todo el trayecto en una estación de tren. Pero habrá que consultar los horarios nuevamente por si cambian. El precio de todo el trayecto es de 8,30 euros paala fecha de nuestro viaje.
Nota:En el apartado de descargas (menu de abajo) podeis bajaros un mapa de toda la ruta.
